Noticias del gran mundo

En busca del hogar: Noticias del gran mundo

Estados Unidos 2020

Direccción: Paul Greengrass

Guion: Luke Davies, Paul Greengrass (Novela: Paulette Jiles)

Música: James Newton Howard

Fotografía: Dariusz Wolski

Reparto: Tom Hanks, Helena Zengel, Neil Sandilands, Elizabeth Marvel, Ray McKinnon

Paul Greengras, director que filma con una contundencia explosiva los filmes de acción regala un western espléndido, clásico y rodado con un pulso extraordinario.

Cinco años después del fin de la Guerra Civil estadounidense, el capitán Jefferson Kyle Kidd (Tom Hanks), veterano de tres guerras, viaja de ciudad en ciudad narrando noticias, hablando de presidentes y reinas, de luchas gloriosas, devastadoras catástrofes y apasionantes aventuras que tienen lugar en cualquier rincón del mundo. Un día, en las llanuras de Texas, el capitán conoce a Johanna, una niña de diez años secuestrada seis años atrás por la tribu Kiowa, y que durante ese tiempo fue educada como uno de ellos. Johanna, en contra de su voluntad, debe irse a vivir a casa de sus tíos, un lugar hostil y desconocido para ella. El capitán Kidd acepta entregar a la niña a sus tutores legales. En el viaje, ambos recorrerán cientos de kilómetros a través de una inhóspita naturaleza, y deberán enfrentarse a enormes dificultades, humanas y naturales, en búsqueda de un lugar al que puedan llamar “hogar”.

Greengrass ha hecho una película con vocación de clásico, que recuerda a los clásicos. Los paisajes amplios y luminosos del desierto contrastan con las noches lluviosas y oscuras de las ciudades en las que el capitán, Kyle Kidd va desgranando sus historias con el afán de devolver la esperanza a seres humanos sumergidos en la amargura y el sinsentido. Si todas las personas somos llamadas a ampliar los horizontes, los que escuchan las noticias del capitán son hombres y mujeres sedientos de ver engrandecer sus paisajes vitales. Son seres humanos sumergidos en la soledad.

Pero también el capitán, no sólo la niña rescatada, necesita otros horizontes, ambos necesitan un lugar donde encontrarse. En ese sentido, la búsqueda de referencias familiares en los amplios paisajes del desierto se convierte también en una búsqueda interior para reconciliarse con los fantasmas del pasado y encontrar un hogar en el que sentirse amado. Kyle y la niña kiowa no son tan distintos… son personajes necesitados de amor, un amor que buscan más allá de las palabras y los caminos.

Las escenas de acción y violencia están construidas con una tensión muy bien dosificada. Los paisajes son de una belleza abrumadora. Los diálogos, o los intentos de comunicarse de Kyle con la niña, son profundos y conmovedores.

Y en medio de la inmensidad del paisaje, aparece un gigantesco Tom Hanks, con una actuación soberbia, dando vida a una persona con un armazón ético excelente, dotado de convicciones y de una grandeza moral apabullante. La niña Helena Zengel le secunda admirablemente con una actuación formidable. Su mirada expresa la conmovedora necesidad de sentirse acogida en medio del miedo y el infierno.

Con una banda sonora extraordinaria y una fotografía magnífica, “Noticias del gran mundo” es una película moral por excelencia. Todas las perversiones que aparecen en el film son tristemente actuales: el racismo, el machismo, la exclusión, el rechazo a los inmigrantes, la ineptitud de la Administración, el menosprecio de la familia…Pero todo tiene solución, nos dirá Greengrass, cuando el ser humano se compromete desde el amor por la acogida de los más débiles. Todos estamos necesitados de buenas noticias… todos estamos invitados a ser buena noticia.

Un gran mensaje, un gran western, una gran película.

JOSAN MONTULL

MANADAS

El auge de agresiones sexuales en grupo se está convirtiendo en una preocupante noticia cotidiana. A partir de los sucesos de Pamplona en los que la tristemente famosa “Manada” forzó a una joven vejándola y grabando su agresión, se ha producido un doble fenómeno.

Por una parte hay una toma de conciencia progresiva de la dignidad de las mujeres. El “No es no” es un grito que clama por defender la libertad de las chicas frente a cualquier tipo de abuso machista.

Por otra parte, y paradójicamente, hay un aumento de las agresiones sexuales en grupo que han disparado todas las alarmas sociales. Desde 2016 hasta hoy han sido más de 100 las agresiones sexuales en grupo de las que se tiene constancia en nuestro país. Por otra parte asusta pensar que muchas de estas agresiones han sido cometidas por menores varones contra chicas también menores de edad.

Ante este fenómeno, y sin pretender sentar ninguna cátedra, me vienen a la cabeza a botepronto una serie de reflexiones que pongo por escrito.

  • La dignidad de las mujeres es absolutamente sagrada. Cualquier agresión machista es denigrante y digna de una condena sin paliativos.
  • Hay actualmente una banalización de la relación sexual que es considerada exclusivamente como una fuente de entretenimiento sin más. La ética, la religión, la ciudadanía, la filosofía, el mundo de los valores ha sido permanentemente maltratado en el sistema educativo por unos y por otros. Se ha venido oyendo que todas estas cuestiones eran puramente personales y familiares, que los proyectos escolares no debían decir nada al repecto. Poco a poco se han ido relegando estos temas y se ha optado por asignaturas útiles y prácticas excluyendo las que implican una cierta reflexión interior.
  • Los medios de comunicación han ensalzado la vida de hombres y mujeres con una moral vergonzante y han hecho de la intimidad un puro espectáculo. Los programas llamados del corazón o los reality shows hacen de las relaciones íntimas entre las personas pura carnaza para ser vendida y consumida. La exhibición pública y detallada, bajo contrato, de infidelidades y desamores se ha convertido así en un nuevo modo de prostitución bajo la aureola de la libertad de expresión. No tiene que extrañarnos la sistemática grabación y difusión por las redes sociales de estos delitos por parte de quienes los cometen.
  • Culpabilizar genéricamente a menores inmigrantes o refugiados de estos hechos atribuyéndoles sin más estas agresiones es una auténtica vergüenza. Estos jóvenes son también víctimas, aunque en algunos casos hayan llegado también a ser agresores, y urgen de nuestra ayuda y nuestro compromiso, que no excluye las acciones legales, sea cual sea la procedencia de los agresores.
  • Una clase política que no ha conseguido llegar nunca a un pacto educativo desde el advenimiento de la democracia hasta hoy está siendo cómplice de desajustes y trastornos emocionales de muchos de nuestros jóvenes, que crecen sin ninguna referencia ética de quienes son sus representantes. No haber llegado a un consenso en algo tan primordial como la educación de nuestros jóvenes pone en evidencia el desamparo en que se encuentran estos.
  • La corrupción de personas poderosas para robar impunemente el dinero de todos con guante blanco y elegancia ha creado en nuestra juventud una auténtica crisis moral, llevándoles a creer en muchos casos que algo sólo se convierte en malo si le pillan a uno y se demuestra su participación.
  • Los menores agresores son el espejo más despiadado que nos muestra el reflejo de una sociedad que en muchos momentos ha perdido la decencia. Necesitan, también ellos, ser ayudados –con la penas que la Justicia les imponga- para que puedan restaurar su propia dignidad.
  • Urge el acuerdo de mínimos para que juntos -Escuela, Judicatura, Partidos Políticos, Confesiones Religiosas, Comunidades Educativas y demás colectivos ciudadanos- podamos aparcar diferencias, tantas veces ficticias, y trabajar unidos por la educación de nuestros adolescente y jóvenes.

Ni el medio ni la brevedad de este texto buscan tener muchas pretensiones. Queden estas líneas, eso sí, como la reflexión rápida de un educador que está convencido, por una parte, de las posibilidades de bondad que hay en cada joven –por más desajustado que esté- y, por otra, de la existencia de colectivos agresivos más sofisticados de los que no se habla tanto; no todos actúan en descampados, viejos almacenes o casas ocupadas…lo hacen es despachos, ambientes elegantes, sonrisas de diseño y lujo sofisticado.

Son, en definitiva, otras manadas que engendran estas camadas feroces.

JOSAN MONTULL